Hombre de variadas facetas, Cicerón fue una de las personalidades más reconocidas dentro de la sociedad de su época. Gracias a sus habilidades llegó a ocupar un lugar como uno de los mayores representantes de la retórica y estilismo de la prosa latina que predominaban en la República romana.
Posteriormente se radicó en Grecia, donde continuó enriqueciendo sus conocimientos en política y filosofía. En esta región Cicerón se mostró muy receptivo hacia todas las manifestaciones pedagógicas que existían, siendo así, discípulo del epicúreo Fedro, así como del estoico Diodoto.
También acudió a la Academia para recibir lecciones de Platón, así como en Rodas, de parte del maestro de la oratoria, Molón de Rodas y del estoico Posidonio.
Tras su regreso a Roma y después de 13 años desarrollando su carrera política, Cicerón obtendría un gran reconocimiento en esta área, asumiendo el cargo como cuestor en Sicilia en el año 76 a.C.
Luego en el año 70 a.C., en vista de los vejámenes cometidos contra los sicilianos por parte del antiguo magistrado Verres, Cicerón ofrecería sus servicios para defenderlos. Al final, los alegatos de Cicerón generaron la condena de Verres, hecho que le ayudaría a obtener una gran fama entre la plebe, consolidándose así, como un gran abogado.
Cicerón se manifestaba abiertamente como partidario del republicanismo, mencionando la necesidad que había dentro de esta corriente política de formar un hombre fuerte cuya presencia trajera estabilidad al Estado.
Dos años después, asumió el cargo de cónsul del Senado, donde impidió la aprobación de la reforma agraria propuesta por Rullo, enfrentándose también a los populares dirigidos por Craso y Cesar. Sin embargo, sería su rechazo a la conspiración de Catilina el hecho más significativo de su carrera. Esto provocó la creación de Catilinarias, 4 discursos pronunciados por Cicerón en el Senado, considerados una de las mejores muestras de su oratoria y que tenían como propósito obtener aprobación en la ejecución de los conspiradores.
Sin embargo, esta acción le llevó a ser exiliado, hasta un año y medio después, cuando regresó a Roma para reivindicar su carrera política luego del asesinato de Cesar promoviendo la restauración del régimen republicano. Pero el ascenso político de Marco Antonio se interpondría en las intenciones de Cicerón, quien recurrió a Octavio, hijo de Cesar, para aliarse en contra de este y derrocarlo. No obstante, su esfuerzo solo fue en vano, ya que, posteriormente, Octavio unió esfuerzos con Marco Antonio para apresarlo y ejecutarlo.
Con el tiempo, su faceta de literato le permitió ser considerado como un referente dentro de la prosa latina clásica en la cual desarrollaría un estilo equilibrado de largos e intrincados periodos.
En estas cartas se evidencian temas de diferente índole, tanto de carácter público como privado entre los que se cuentan acontecimientos personales, políticos, oficiales, etc.
Dentro de este material permanecen conservados más de 50 discursos judiciales, así como de defensa, siendo estos, en los que más se destacó Cicerón, componiendo para amigos, protegidos y personas desconocidas que acudían a él por ayuda legal.
Junto a estos, también se encontraban discursos de acusación contra Verres denominados In Verrem y conocidos posteriormente como Verrinas.
También destacan las Filípicas, un conjunto de 17 discursos que tenían como propósito impedir el ascenso de Marco Antonio al poder.
Para la creación de sus obras Cicerón tomó como referencia a otros pensadores, siendo Platón su principal fuente de inspiración y de quien usaría los títulos, los temas y la forma dialogada para aplicarlas en la composición de sus obras De Republica y De Legibus.
Como premisas, De Republica plantea la creación de un nuevo sistema político, resultado de la combinación de la democracia, la oligarquía y la monarquía, mientras que De Legibus expone planteamientos sobre el derecho natural, el orden estatal y las leyes sagradas.
En el resto de la obra filosófica de Cicerón la forma dialogada obtuvo un mayor uso, siendo esta desarrollada en momentos donde podía mantenerse alejado de cuestiones políticas.
Gracias al propósito de Cicerón por crear un vocabulario apropiado para la exposición de temas filosóficos, adaptando para ello, términos griegos, la lengua latina pudo enriquecerse aún más.
Fuentes
- EcuRed: Cicerón
- Biografía y Vidas: Marco Tulio Cicerón
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Origen de Cicerón
Político, orador y filosofo latino nacido en Alpino, Italia, en el año 106 a.C, región en la que crecería dentro del seno de una familia plebeya. Aún siendo muy joven, Cicerón fue trasladado a Roma, donde recibiría lecciones de oradores famosos, así como jurisconsultos. La culminación de la guerra civil que azotaba la ciudad en el año 82 a.C marcaría el inicio de sus estudios en el mundo de las leyes, lo cual, le permitió convertirse en uno de los abogados más reconocidos en Roma.Posteriormente se radicó en Grecia, donde continuó enriqueciendo sus conocimientos en política y filosofía. En esta región Cicerón se mostró muy receptivo hacia todas las manifestaciones pedagógicas que existían, siendo así, discípulo del epicúreo Fedro, así como del estoico Diodoto.
También acudió a la Academia para recibir lecciones de Platón, así como en Rodas, de parte del maestro de la oratoria, Molón de Rodas y del estoico Posidonio.
Tras su regreso a Roma y después de 13 años desarrollando su carrera política, Cicerón obtendría un gran reconocimiento en esta área, asumiendo el cargo como cuestor en Sicilia en el año 76 a.C.
Luego en el año 70 a.C., en vista de los vejámenes cometidos contra los sicilianos por parte del antiguo magistrado Verres, Cicerón ofrecería sus servicios para defenderlos. Al final, los alegatos de Cicerón generaron la condena de Verres, hecho que le ayudaría a obtener una gran fama entre la plebe, consolidándose así, como un gran abogado.
Cicerón se manifestaba abiertamente como partidario del republicanismo, mencionando la necesidad que había dentro de esta corriente política de formar un hombre fuerte cuya presencia trajera estabilidad al Estado.
Carrera política de Cicerón
Cicerón tuvo una prominente trayectoria dentro de la política, en la cual comenzó siendo elegido como edil, para luego, en el año 66 a.C., obtener el cargo de pretor donde promovió el acercamiento entre caballeros y senadores.Dos años después, asumió el cargo de cónsul del Senado, donde impidió la aprobación de la reforma agraria propuesta por Rullo, enfrentándose también a los populares dirigidos por Craso y Cesar. Sin embargo, sería su rechazo a la conspiración de Catilina el hecho más significativo de su carrera. Esto provocó la creación de Catilinarias, 4 discursos pronunciados por Cicerón en el Senado, considerados una de las mejores muestras de su oratoria y que tenían como propósito obtener aprobación en la ejecución de los conspiradores.
Sin embargo, esta acción le llevó a ser exiliado, hasta un año y medio después, cuando regresó a Roma para reivindicar su carrera política luego del asesinato de Cesar promoviendo la restauración del régimen republicano. Pero el ascenso político de Marco Antonio se interpondría en las intenciones de Cicerón, quien recurrió a Octavio, hijo de Cesar, para aliarse en contra de este y derrocarlo. No obstante, su esfuerzo solo fue en vano, ya que, posteriormente, Octavio unió esfuerzos con Marco Antonio para apresarlo y ejecutarlo.
Pensamiento filosófico de Cicerón
Cicerón dio muestras de una actitud antidogmática como resultado de su formación en las principales escuelas filosóficas, lo que hizo que adoptara elementos de diferentes corrientes de pensamiento. A pesar de la falta de autenticidad en la creación de sus obras, Cicerón se convirtió en un digno representante de la propagación del pensamiento griego gracias a sus sincréticas exposiciones.Con el tiempo, su faceta de literato le permitió ser considerado como un referente dentro de la prosa latina clásica en la cual desarrollaría un estilo equilibrado de largos e intrincados periodos.
Obras de Cicerón
Dentro de la trayectoria que conforman las obras de Cicerón cabe destacar que fue una persona con gran habilidad para escribir en diferentes formas:Cartas
La correspondencia de Cicerón representa un reflejo de su verdadera personalidad de la cual permanecen conservadas actualmente más de 900 cartas. Dicho material fue parcialmente redescubierto a mediados del siglo XV por Petrarca.En estas cartas se evidencian temas de diferente índole, tanto de carácter público como privado entre los que se cuentan acontecimientos personales, políticos, oficiales, etc.
Discursos
Cicerón aprovechó los amplios conocimientos adquiridos en el campo de la retórica para aplicarlos en la composición de sus discursos, los cuales, publicó en gran cantidad, siendo considerados posteriormente como obras literarias. Es aquí donde resultan destacables sus habilidades como literato, lo cual, le permitió alcanzar una posición privilegiada en la política romana de su tiempo.Dentro de este material permanecen conservados más de 50 discursos judiciales, así como de defensa, siendo estos, en los que más se destacó Cicerón, componiendo para amigos, protegidos y personas desconocidas que acudían a él por ayuda legal.
Junto a estos, también se encontraban discursos de acusación contra Verres denominados In Verrem y conocidos posteriormente como Verrinas.
También destacan las Filípicas, un conjunto de 17 discursos que tenían como propósito impedir el ascenso de Marco Antonio al poder.
Filosofía
Serían los últimos años de vida de Cicerón en los que la filosofía ocuparía un lugar primordial, volcando su atención en las principales escuelas filosóficas griegas de la época como la Academia, el Liceo y la Estoica para exponer y analizar su pensamiento. Las inclinaciones personales de Cicerón resultado de su carácter ecléctico parecían estar enfocadas hacia el escepticismo académico, adoptando también una posición reacia frente al epicureísmo.Para la creación de sus obras Cicerón tomó como referencia a otros pensadores, siendo Platón su principal fuente de inspiración y de quien usaría los títulos, los temas y la forma dialogada para aplicarlas en la composición de sus obras De Republica y De Legibus.
Como premisas, De Republica plantea la creación de un nuevo sistema político, resultado de la combinación de la democracia, la oligarquía y la monarquía, mientras que De Legibus expone planteamientos sobre el derecho natural, el orden estatal y las leyes sagradas.
En el resto de la obra filosófica de Cicerón la forma dialogada obtuvo un mayor uso, siendo esta desarrollada en momentos donde podía mantenerse alejado de cuestiones políticas.
Gracias al propósito de Cicerón por crear un vocabulario apropiado para la exposición de temas filosóficos, adaptando para ello, términos griegos, la lengua latina pudo enriquecerse aún más.
Fuentes
- EcuRed: Cicerón
- Biografía y Vidas: Marco Tulio Cicerón
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